En el tercer día de vista del caso Doral, se continuó con el interrogatorio de la ex Secretaria de Hacienda, Lcda. Xenia Vélez. Ella indicó que junto con Harry Márquez y Blanca Álvarez negociaron el acuerdo con Doral. Indicó además, que ellos fueron los que ellos tres fueron los que decidieron convertir un derecho a amortizar deuda en un reintegro. Eso no ha sido mencionado por la prensa pero da al traste con la teoría que Jesús Méndez, entonces Secretario de Hacienda, intervino en la decisión para ayudar a su ahora patrono. Interesantemente, el Gobierno no hizo esa pregunta. La Lcda. Vélez continuó diciendo que buscó el valor del intangible (el derecho a amortizar lo que quedaba de los $889 millones+ del acuerdo de 2006). Indicó que su función no era tasar el valor del intangible si no llegar a un acuerdo con Doral del valor del intangible. A esos efectos, Hacienda y Doral acordaron hacerlo a base del valor no realizado el valor del derecho a amortizar. La premisa inarticulada es que esto era una prerrogativa de Hacienda.
Las partes estuvieron largo rato en la palabra “concomitant” en uno de los anejos del acuerdo y la Lcda. Vélez indicó que el book value y el tax value no eran necesariamente iguales pero que en el acuerdo se usó la palabra para indicar que ambos valores iban en la misma dirección. Al fin terminó su testimonio. Es importante mencionar que la Lcda. Vélez siempre indicó en su testimonio que había que reconocer el derecho de Doral a amortizar los $889 millones+ del acuerdo de 2006 (donde se reconoce que Doral sobre pagó impuestos) y enfatizó que esto en realidad comenzó en el 2004. Aunque la Lcda. Vélez admitió que se basó en las representaciones de Doral, también dijo que durante el proceso, Hacienda mandó a un empleado a revisar las planillas de Doral.
El señor Juan Zaragosa fue el próximo testigo. Es el perito del gobierno que a su vez ha trabajado en más de 200 closing agreements. Zaragosa se vio claro, tranquilo y definitivamente un buen testigo. Tuvo inmediatamente la atención de la Juez. Indicó que hay falseamientos de hechos esenciales en el acuerdo de 2012, siendo esta la primera vez que se escucha esto. Indicó que según la planilla de Doral de 2010, el banco estaba amortizando el total de los $59 millones+ ($889/15) que podía deducir y que por tanto, en el 2012, el remanente era de $652 millones+ y no $766 millones+. Esto fue de gran importancia pero la Juez le preguntó si no se suponía que Hacienda que revisara estos asuntos y el testigo titubeó antes de contestar. Definitivamente era un asunto medular.
En el turno de Doral, el Lcdo. Ramón Rosario hizo un trabajo magistral de contrainterrogatorio. Confrontó a Zaragosa con su deposición. Zaragosa admitió que no puede hablar sobre la intención de las partes en el acuerdo de 2012, que si Doral enmendaba sus planillas en el 2006 hubiese tenido derecho a un reintegro pero no de cuanto. Admitió además, que ni en el acuerdo 2006, ni en el 2012 se dice cuanto fue el sobrepago y que no tiene las herramientas para calcular ese sobrepago. El Lcdo. Rosario forzó a Zaragosa a admitir que si Doral no podía usar deducción (la amortización) en todo o en parte de 2006, podía utilizarlos luego como net operating loss. Otro factor importante es que Zaragosa no miró la planilla de Doral del 2012 ANTES de emitir su opinión, a pesar que Hacienda obviamente la tenía. Seguido a la contestación, Rosario forzó a Zaragosa a admitir que si sumaba lo que dice la planilla de 2012 dice Doral no iba a utilizar, mas el numero de $652 millones+ se llega a los $766 millones+ del acuerdo 2012. Finalmente, Rosario logró que Zaragosa admitiera que no conocía de ley o algo similar que prohibiera que Hacienda y Doral acordaran convertir un derecho a amortizar en un derecho a reintegro. El Gobierno trató de rehabilitar a Zaragosa pero no creo que lo haya logrado. Sin embargo, tengo que señalar que Zaragosa es un buen testigo pericial, nunca perdió la ecuanimidad a pesar de que se confrontó con varias contradicciones en su testimonio en corte y en la deposición. Es un perito que yo contrataría sin problemas.
El próximo testigo fue el Sr. César de Jesús, CPA y empleado del CPA Zaragosa. Su testimonio se centró en unas tablas difíciles de entender que se suponía apoyaban el testimonio de Zaragosa. Mencionó que el acuerdo de 2012 Hacienda quería monetizar a Doral. Entiendo fue neutralizado por el Lcdo. Rosario y de Jesús no fue un buen testigo como su jefe.
Durante el testimonio del Sr. de Jesús, salí un momento y vi a los periodistas de los telediarios congregados cerca del elevador, donde se supone este si no están en la sala. Algo me levantó sospechas y me mantuve cerca. A los pocos minutos, se abre el elevador y sale la Secretaria de Hacienda, Melba Acosta, quien es testigo en el caso. Inmediatamente la rodean los periodistas y ella se despacha con la cuchara grande, adelantando lo que será su testimonio en ese día; Doral no paga impuestos, este caso hay falseamiento de dos hechos esenciales, etc. ¿Que coincidencia que los periodistas no estuvieran en sala, donde había testimonio y estuvieran listos para recibir a la Secretaria? Al no poder grabarla en sala, hicieron lo que era mejor, presentar la visión de Hacienda sin contrainterrogatorio y con preguntas suaves de los cómplices de la prensa. Gibbs Rule #39.
La última testigo del Gobierno fue la Secretaria Acosta. Ella fue a testificar de por qué declaró nulo el acuerdo de 2012. Indicó que uno de los auditores externos le indicó que el sabíaa de la existencia del acuerdo de 2012 pero no encontraba el mismo, que no existía un expediente del acuerdo, etc., tratando de dar la impresión que la pasada administración quería ocultar el acuerdo. La Secretaria indica que solicitó una investigación y se encontraron dos falseamientos. Sin embargo, eso no es lo que dice su carta declarando el acuerdo nulo. Indica que la ley de Hacienda (Acosta es abogada y CPA) no permite reintegro si no hay sobrepago. Admite que solicitó información a Doral de los sobrepagos y que Doral le envió un grupo de cheques.
Durante su contrainterrogatorio, contrario a lo dicho en la prensa, Acosta se vio tensa y confortativa. Tuvo que hacer varias admisiones sobre lo que decía su carta v. lo que se alegaba, lo que sabe o no del acuerdo de 2012, etc. En realidad su testimonio carecía de utilidad y no añadió mucho al caso del Gobierno, excepto decir que la economía no fue factor, que si hubiese estado boyante, hubiera hecho lo mismo y que los $229 millones+ era el presupuesto de la Rama Judicial (hit, hit)
Durante el fragor del contrainterrogatorio surgió una serie de intercambios entre el Gobierno y la Juez sobre las limitaciones que esta última había hecho a la prueba. La juez Pérez, la cual ha llevado bien un caso difícil, indicó que ella había permitido al Gobierno cuestionar el Inciso H, el cual no habían hecho anteriormente y se suscitó el toma y dame. Al concluir el caso del Estado, la Lcda. Claudia Juan del Departamento de Justicia y una excelente abogada, hizo una larga oferta de prueba que en mi opinión va a asegurar una larga apelación si pierden.
Luego de que terminó el Gobierno, Doral comenzó la presentación de prueba de Doral, comenzando con el Lcdo. Ubarri, uno de los vicepresidentes de Doral en ese momento. Comenzó a testificar sobre las conversaciones y negociaciones de Doral y Hacienda, confirmado que eran Vélez, Márquez y Álvarez con quienes hablaron y que se rechazo la propuesta original de Doral. Por Doral estaban Wahlman, Wakeman y Ubarri. A las 6:30 pm, la juez recesó y se continuará el lunes. Trataré de estar allí.